Desde niños el cuidado de
nuestros dientes ha de ser esencial para que la salud bucal sea favorable. Los tratamientos
de odontología son ahora mucho más accesibles y adaptables al bolsillo de
los usuarios que antes. El niño debe empezar a limpiarse los dientes desde los
dos años de edad aproximadamente, para mantener una correcta higiene bucal.
La cita con el odontólogo no será hasta más tarde, si no ha habido un
problema anterior (rotura de dientes, caries, dientes más oscuros... pero no
suele ser lo habitual). A medida que el niño crece, los problemas de
ortodoncia suelen ser comunes, pero es el momento de arreglar los dientes
para un futuro.
En la adolescencia, los
problemas de caries y encías deben tratarse de inmediato para que no se
prolonguen durante años, pues suelen ser las causas de enfermedades
bucodentales más graves. En estas y edades posteriores, ponerse un implante dental es otro de los tratamientos solicitados. Normalmente
suele ser en la juventud y media edad, y ya en edades avanzadas.
Blanqueamientos,
higienes...
Actualmente, los blanqueamientos
dentales suelen ser preferentes en muchas clínicas dentales. Sus técnicas
fáciles y el bajo coste son principales razones para elegirlo. Con el
blanqueamiento obtenemos unos dientes más blancos y saludables... para sonreír
sin miedo.
Para salvaguardar los
dientes, las higienes y limpiezas bucales deben realizarse cada año o al
menos cada seis meses. Con ello aseguramos que el sarro y las manchas
desaparezcan. Ello debe ir siempre acompañado de una correcta limpieza en casa;
se recomienda hacerlo al menos 3 veces al día, es decir, después de cada
comida. Es algo que aconsejan los odontólogos desde pequeños.
El cuidado continuado de
los dientes evita la aparición de caries y, no solo ello, sino de enfermedades
algo graves, como la gingivitis, o la periodontitis que pueden provocar la
caída de los dientes si no se detecta con suficiente antelación. Las fundas de
los dientes y los brackets, o aparatología fija y dental, que ahora
aporta nuevos sistemas transparentes, también suelen pedirse en las clínicas
dentales. En todo, caso hemos de escoger nuestro dentista de confianza que nos
aconsejará sobre lo que necesitamos para el cuidado de nuestra boca.