Nuestro
país es rico en un montón de recursos, muchos de ellos desconocidos. Sabemos
que nuestras costas gozan de enorme reputación entre los turistas extranjeros,
y de hecho sin el empuje económico que ello supone nuestra economía estaría aún
peor. Pero hoy queremos referirnos a unos sitios excelentes que podemos conocer
gracias a un pequeño entrenamiento y que son la mejor manera de descubrir por
nosotros mismos el estado actual de nuestros mares. Nos referimos,
naturalmente, a los fondos marinos.
De
entrada, la recomendación más lógica es la de que encuentres un sitio donde
practicar el buceo de la mejor manera. No podemos meternos en el agua con una
botella de oxígeno si no sabemos cómo respirar, qué técnicas hemos de usar para
desplazarnos o cuánto tiempo se debe estar en descompresión para eliminar el
nitrógeno. Por ello os recomendamos que entréis aquí, en este directorio virtual llamado
buscandotelefonos.es, y os pongáis en contacto con algún sitio donde se den
clases de buceo. Seguramente que no os arrepentiréis de hacerlo, porque para
estas ocasiones no hay nada mejor que aprender de los mejores. ¿Lo mejor de
todo? Que podemos conseguir buscar todo lo que precisamos y hacerlo de una
forma tan dinámica y adecuada que nunca como hasta ahora nos habíamos percatado
de lo mucho y bien que funcionan estos directorios para encontrar todo… Aunque
sea debajo del mar.
Una
vez que hayamos adquirido la suficiente práctica es cuando de verdad nos
podemos dirigir a un fondo marino y explorarlo. Por supuesto, debemos hacerlo
siempre acompañados, no conviene que en nuestras primeras inmersiones estemos
solos. Además, se disfruta mucho más la experiencia con varias personas, porque
se hace evidente que la belleza de todo lo que el mar nos puede dar, si es
compartida, es doblemente hermosa. Así, podremos ver plantas, corales,
oquedades, grutas naturales... Y peces, muchos, de todos los colores, formas y
texturas.
En
este capítulo si quisiéramos hacer hincapié, porque a veces podemos estar
tentados de tocar uno de estos animales, y con ello lo único que podemos
provocarnos es una situación molesta por algún pinchazo venenoso, un mordisco o
algún susto mayor. Así que ojo con esto, por favor.
De
lo que se trata es de gozar de verdad con lo que el océano y el mar nos
ofrecen. Todo esto es un territorio inexplorado que permanece inédito a
nuestros ojos y que podemos descubrir a poco que nos lo propongamos. Será una
manera excelente de sentirnos como si fuésemos exploradores, ¿no creéis?
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