miércoles, 30 de enero de 2013

¿Pesadilla... o dulces sueños?



Últimamente está causando furor un tipo de programa de cocina que se dedica a mostrarnos el estado de los restaurantes españoles por dentro. Se elige un negocio determinado (el cual haya pedido ayuda previa) y se revisa su cocina, sus cámaras frigoríficas, cómo se gestionan los pedidos y la barra, la habilidad y competencia de los camareros, etc. La verdad es que el formato es interesante, sobre todo porque nos muestra cómo es uno de estos lugares en todos sus aspectos. Pero también es verdad que el programa tiene mucho de amarillismo, pues se centra demasiado en mostrarnos el pésimo estado de algunas cocinas, que adolecen de la más mínima medida higiénica, lo cual provoca en el espectador esa reacción morbosa que tanto buscan últimamente los creativos de la tele, algo así como mostrar rechazo y repulsa pero sin poder parar de ver la pequeña pantalla.
Sin embargo la situación actual de nuestros restaurantes es muy distinta. España puede vanagloriarse de tener uno de los mejores servicios de restauración europeos, porque entre otras cosas tenemos un largo bagaje que nos ha permitido avanzar por la senda correcta. No en vano nuestra posición como destino turístico de primera magnitud ha supuesto que la fórmula ensayada en estos negocios sea cada vez más perfecta. Y si no nos crees, lo mejor que puedes hacer es establecerte un calendario de actuación para comprobarlo por ti mismo. Toma nota de la comanda, por favor.
De primero tienes la opción de conectarte a www.canalrestaurantes.es, una página en la que vas a encontrar ese restaurante coqueto y sencillo que tanto te gusta. Explórala con tranquilidad y verás que la información que te ofrece está muy bien ordenada, diferenciada por sectores y por zonas geográficas.
De segundo, está claro: elige un restaurante y date un homenaje. ¿Cuánto tiempo hace que no practicas ese noble arte de la comida sosegada, con amigos o familiares, en el salón comedor de un lugar pequeñito y acogedor? Olvida por un momento las cuestiones económicas y date un capricho hombre, seguro que lo vas a agradecer enormemente.
Y para terminar la jornada, pensamos que el mejor postre es que compruebes que el grado de satisfacción ha sido enormemente alto. Una vez que termines tu comida comprobarás que la salud de los restaurantes de España es notable. Puede ser que haya lugares infectos en los que la suciedad sea la nota dominante, pero ya te avanzamos que eso no es la norma general. De hecho, más que decírtelo casi mejor dejamos que lo compruebes por ti mismo.


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